Nueva temporada en el Reina

Con el título Las mujeres artistas, la performance y el arranque del siglo XX en España, la
programación consta de 9 exposiciones temporales que podremos ver expuestas en la sede
principal del museo. Debido a las reformas para la mejora de los espacios que van a realizarse
tanto en el Palacio de Cristal como en el Palacio de Velázquez, por el momento no van a
poder ser utilizados.

Entre las exposiciones temporales destacan las retrospectivas que se van a hacer sobre
Soledad Sevilla, que estará expuesta al público del 25 de septiembre de este año al 10 de
marzo de 2025, la internacional Hugette Caland o Marisa González. Veremos también cómo
se pone en valor la figura del comisario con la exposición El aire conmovido…, dirigida por
Georges Didi-Huberman. Otras exposiciones nos acercarán la obra de Grada Kilomba, Laia
Estruch, Néstor Martín-Fernández de la Torre y Naufus Ramírez-Figueroa.

La novena exposición será Esperpento. Arte popular y revolución estética, comisariada de
manera colectiva y donde pretende abordarse el concepto “esperpento” de Ramón María del
Valle Inclán mediante siete grandes secciones. Muchas de estas exposiciones son todavía
mérito del anterior director del museo, Borja Villel, aunque Manuel Segade las ha continuado
y las considera propias.

Tras presentar brevemente las exposiciones que conforman el programa, Segade procedió a
anunciar el plan de reorganización de la sede central, modificación que no será efectiva hasta
2027, pero que pretende una redistribución de los espacios que permita una visita más
ordenada. Las plantas de abajo se destinarán a exposiciones temporales y las superiores a la
colección permanente, distribuida cronológicamente, con la apertura de una planta que
abarcará de 1980 a la actualidad, en la que se contempla adquirir alguna obra que amplíe la
colección. También comentó la idea de aprovechar las terrazas, así como una colaboración con el MAC de Portugal mediante el intercambio de El abrazo de Juan Genovés y Autorretrato en un grupo de Almada Negreiros.

Pese a que este año han querido dar protagonismo a las mujeres artistas, sigue sin haber una
integración real de las mujeres. Las exposiciones sobre mujeres son, en la mayoría de los
casos, comisariadas por mujeres, pero ninguna mujer es comisaria de alguna exposición que
no sea exclusiva sobre una mujer. Desde hace años se va viendo cómo, poco a poco, se va
apostando por incluir a las mujeres, tanto en los museos como en las aulas, pero es siempre
una inclusión forzada y bastante parcelaria. Si se quiere hacer una inclusión real, el museo
debería dar un paso más para que el arte sea para todos, y no relegar el arte de las mujeres
para las mujeres, y así ser más contemporáneo e inclusivo.

Además de anunciar que habrá una reestructuración del organigrama de gobierno del museo,
en la rueda de prensa se mencionaron los proyectos de educación con grupos para jóvenes y
para personas mayores. Pese a contar en el grupo de jóvenes de 15 a 17 con el influencer
Putochinomaricón, el Reina sigue teniendo déficit en acercarse a los más jóvenes. Otros
museos como el Thyssen colaboran con influencers para generar contenido con curiosidades
de los cuadros para así llegar a las nuevas generaciones, así como el popular concurso
VersionaThyssen que año tras año da a conocer tanto nuevas obras como jóvenes artistas.

Habrá que ver en los próximos años cómo va cogiendo forma el proyecto, ya que Segade
viene de ser el director de un museo como es el CA2M, bastante activo en programas para
hacer del museo un espacio de interacción ciudadana, abierto al público, e implicado con la
sociedad. Sería interesante trasladar algo similar al Reina Sofía y mostrar al público un
museo más cercano y, realmente, hacer una labor de atraer el arte contemporáneo a un sector
de la población más amplio, más allá del especializado y del turismo que accede al museo
exclusivamente para ver el Guernica.

Itziar Ortiz Serrano