Pensar en una exposición de arte contemporáneo en España en la actualidad es sinónimo de visita a Madrid o Barcelona, Málaga o Valencia. Lo que no es tan habitual es asociar este tipo de muestras y pensar en Toledo, ciudad Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y referente en cuanto al pasado de la historia de este país. Este lugar donde artistas como Juan de Borgoña o El Greco vivieron y trabajaron o donde personajes literarios como Miguel de Cervantes o Lope de Vega se instalaron, no suele ser un referente en cuanto a la contemporaneidad se refiere, ¿o sí? Para poder responder a esta pregunta habría que traer a colación la exposición Miradas fragmentadas. Artistas españoles del siglo XXI que se puede visitar desde el 7 de febrero al 5 de mayo en Toledo, candidata a Capital Europea de la Cultura en el año 2031.
Alrededor de cincuenta artistas y cincuenta obras son los componentes de esta indispensable exposición este año. Las pinturas, esculturas, fotografías y creaciones audiovisuales son pertenecientes a la muy celebrada Colección HEF (Hermanos Entrecanales Franco), destacando por sus fondos de arte que abarcan desde el siglo XIX hasta el XXI. Muchas de las pinturas y fotografías expuestas se presentan por primera vez al público.
Sus creadores y creadoras son los referentes del arte contemporáneo español, en especial del siglo XXI. Nombres como Isabel Muñoz, Jaume Plensa, Manolo Valdés, Nico Munuera, Soledad Sevilla o Eduardo Arroyo, entre otros, son los protagonistas de la muestra en la que se pueden apreciar los diferentes movimientos y tendencias que han marcado el arte en este último siglo desde la figuración a la abstracción. El hilo conductor de la misma es la recopilación y correlación de los artistas más importantes de nuestro siglo en una selección muy cuidada que ya desde el inicio apunta a su dificultad. Y es que, afortunadamente, España ha sido el hogar de artistas de renombre internacional que se inspiraron en sus ciudades natales, su entorno, su país. La vida de estos artistas ha sido la inspiración para sus obras y su entendimiento es indispensable para poder disfrutar de esta experiencia en un espacio de la ciudad tan emblemático como el Centro Cultural de San Marcos en el casco histórico. Las obras se sitúan una al lado de la otra con una cartela que las separa, pero que a la vez contextualiza las creaciones artísticas con un resumen breve de la vida del artista enlazando con una corta explicación de la obra. La disposición logra un discurso que hace dialogar a las obras entre sí, reuniendo a artistas de distintas generaciones a la vez que se pretende atraer a diferentes públicos de diversas edades en un mismo espacio.
La idea no es desarrollar una historia cronológica del arte español, sino un viaje continuo de ideas, técnicas, visiones, miradas – Diana Jusdado (Comisaria)
La relación con la arquitectura es también relevante, como apunta la comisaria de la exposición Diana Jusdado y que se observa como uno de los sellos de identidad de sus instalaciones y montajes. En el antiguo convento de San Marcos, intervenido y convertido en centro cultural, todavía se advierten los espacios originales o las pinturas murales religiosas actuando el contenedor como una cápsula del tiempo que acoge a los contemporáneos de nuestro arte. Pasado y presente se unen en lo que es, posiblemente, la mejor exposición que ha habido en la capital castellano-manchega y que atrae al público desde diversos puntos, siendo el arte y su disfrute su principal motivación. Los paneles blancos donde cuelgan los cuadros o las fotografías contrastan con el edificio restaurado y modernizado que siglos atrás actuó como punto de referencia en la vida de los toledanos. En 2025, este centro se vuelve a convertir en un enclave fundamental para el ocio de su población y los apasionados del arte.
Con esta muestra, la ciudad reivindica también su contemporaneidad, en muchas ocasiones silenciada o poco explorada, como ocurre con la figura del escultor y toledano Alberto Sánchez, un exponente del arte español contemporáneo que recientemente ha comenzado a recibir el crédito y reconocimiento que merece como ejemplifica la incorporación de una sala de exposición dedicada al artista en el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Castilla-La Mancha donde se encuentra la colección Roberto Polo. Miradas fragmentadas. Artistas españoles del siglo XXI es otro ejemplo de la visión moderna de la ciudad.
Carmen Calvo, Luis Gordillo, Felicidad Moreno o Victoria Civera son el exponente del arte contemporáneo español y muestran en su evolución su permanencia y su papel fundamental en el panorama artístico de este país, no sólo del siglo XX, sino también del XXI. A pesar de tratarse de una selección de artistas, en la que faltan algunos nombres importantes, se genera un mapa del arte actual, heredero de sus antecesores y de las etapas previas de estos artistas que han logrado adaptarse a los nuevos tiempos sin renunciar a su esencia, a su particularidad y, en resumen, a su arte.
